Desde que empezamos a estudiar diseño gráfico y a través de libros nos enseñan que el color juega un papel cruzial a la hora de comunicar emociones y transmitir ideas, pero en el desarrollo de una imagen corporativa, en ocasiones es mejor prescindir de este elemento.

Cuando hablo de «prescindir del color como elemento corporativo» hago referencia a los colores blanco y negro, ya que son colores neutros, que en principio no transmiten sensaciones o asociaciones, pero a lo largo de este artículo veremos que no tiene porque ser así.

En el mercado existen muchas marcas que no tienen establecido un color corporativo y usan el blanco o negro a la hora de implantar su marca en diferentes soportes, prescindiendo de este elemento como diferenciador respecto a otras marcas de su misma área.

A continuación vamos a ver bajo qué circunstancias es recomendable no usar un color corporativo.

¿Cuando es aconsejable prescindir de color corporativo en una marca?

Por necesidades de estilo

Igual que asignar un color determinado a una marca le asigna unos valores y genera una percepción en los usuarios, su ausencia también. Esta neutralidad en el color le aporta a la marca una flexibilidad y libertad a la hora de comunicar.

Como ejemplo tenemos a las marcas de ropa, muchas de ellas usan el blanco y el negro como sus colores corporativos. Las razones para tomar esta decisión respecto al color pueden ser muchas, entre ellas conseguiremos una mayor legibilidad en todo tipo de soportes y entornos donde entre en juego la marca.

Siguiendo el ejemplo de las marcas de ropa, con el uso del blanco y negro como colores corporativos evitaremos quebraderos de cabeza a la hora de integrar nuestro logotipo en piezas publicitarias como cartelería, vallas, spots para televisión etc…

Esta neutralidad también les ayuda a usar su marca en todas las estaciones del año sin perjudicar su legibilidad, indistintamente si usan tonos naranjas-rojos para el otoño o verdes-amarillos para la primavera.

Si el sector en el que funciona la marca esta repleta de logotipos coloridos, la ausencia de este será un modo de diferenciación respecto a la competencia.

Para no llamar la atención

Aunque pueda resultar contradictorio respecto al principal motivo para el desarrollo visual de una marca, hay ocasiones en las que una marca necesite pasar más desapercibida, ser más sutil y usar otros recursos para destacar sobre la competencia y llamar la atención. En este caso tenemos el ejemplo en la marca de un bufete de abogados

Uso y aplicaciones de la marca

Una marca puede ser implantada en multitud de soportes, pero dependiendo de campo en el que estemos trabajando es importante tenerlo en cuenta a la hora de desarrollar la marca visual de una empresa, ya que determinados soportes son un elemento clave a la hora de mostrar la marca, como puede ser en el sector automovilístico y el color en estos casos puede ser un gran problema.

El blanco y negro como colores corporativos – Conclusión

El uso de un color corporativo no tiene porque ser de obligado cumplimiento. Debemos analizar este punto y ver si realmente merece la pena usar el color como elemento característico de la marca, que nos ayude a diferenciarnos respecto al resto con quienes convivirá.