¿Es la IA una amenaza para el diseñador gráfico?

La IA y el diseño gráfico

Desde la irrupción de la IA, han surgido dos posiciones dentro de los profesionales del diseño gráfico. Por un lado los que ven a la IA como una amenaza para la profesión y por otro los que la toman como una oportunidad para mejorar los procesos de trabajo.

En este artículo quiero analizar si la inteligencia artificial realmente supone una amenaza o una oportunidad para el diseño gráfico con un ejemplo práctico: El desarrollo de una identidad visual, que puede ser extrapolable a cualquier otro proyecto de diseño gráfico, como la creación de piezas publicitarias o un producto digital.

Herramienta IA para el desarrollo de la imagen visual de una marca

A continuación voy a analizar una herramienta que hace uso de la IA para el desarrollo de la imagen visual de una marca. Veamos hasta que punto nos sería útil el uso de esta herramienta y si realmente puede llegar a reemplazar a un diseñador gráfico.

Looka

La herramienta se llama Looka y nos ofrece la posibilidad de diseñar un logo de una forma sencilla y «divertida». El proceso de creación de un logotipo personalizado con Looka implica los siguientes pasos:

• Introducción de la información: El usuario proporciona información sobre la empresa o marca, como el nombre de la empresa, el eslogan, la industria donde desempeña su labor, etc.
• Selección de estilos: Looka presenta una serie de estilos y diseños de logotipos para que el usuario elija el que más le guste.
• Selección de colores: El usuario puede elegir los tonos que compondrán el logotipo
• Personalización: A partir del estilo y diseño elegidos, Looka ofrece herramientas de personalización para que el usuario pueda ajustar el color, el tamaño y la fuente del logotipo.
• Descarga: Una vez que el usuario está satisfecho con el diseño de su logotipo, puede descargar los archivos de imagen en diferentes formatos para su uso, diseño de tarjetas de visita o plantillas para redes sociales.

En la imagen superior podéis ver una muestra de los resultados que ofrece para la identidad visual de una empresa con nombre Talkao, enfocada en ofrecer soluciones de traducción a través de productos digitales como aplicaciones o sitios web, cuyo eslogan es «Break languages barriers».

Al finalizar el proceso tenemos la identidad visual de nuestra marca. ¿Pero no echáis en falta algo?¿Cómo sabremos que la opción escogida encaja con la estrategia y el posicionamiento de la marca?¿Destacará sobre la competencia? La respuesta es sencilla: No lo sabremos. Porque antes de desarrollar ideas y conceptos necesitamos investigar y recoger toda la información para saber con qué metas estamos diseñando, y eso no lo conseguimos introduciendo el nombre de la marca, el nicho donde convivirá o el eslogan.

Es normal pasar horas y «divertirte» utilizando esta herramienta porque la combinación de posibilidades es casi ilimitada. Pero nunca sabrás si la decisión tomada es correcta porque no ha sido elegida bajo unos criterios definidos y si para colmo no disponemos de los conocimientos en comunicación visual, la decisión no pasará de ser una mera cuestión de gustos subjetivos, que para nada cumplen con el propósito de disponer de una identidad visual.

Otras herramientas IA para el diseño gráfico

Khroma

Existen otras herramientas que hacen uso de IA, como Khroma que nos ayudan a elegir una paleta de colores para nuestros proyectos. Es una buena opción para barajar una gran variedad de propuestas generadas en poco tiempo, pero como vimos en el caso anterior… ¿Cómo sabremos que la combinación de colores es correcta?¿es válida esa paleta de colores para impresión en colores Pantone o cuatricromía?¿Y si queremos llevar esa paleta de colores a distintos soportes como el vinilo? Seguramente tendremos más de un quebradero de cabeza, porque son cuestiones técnicas que solo un diseñador gráfico sabe lidiar y que podemos solventar exclusivamente con la carta de colores en la mano. Ningún algoritmo digital nos va a dar respuesta ante este tipo de situaciones.

Namelix

Cuando nos enfrentamos a un proyecto de identidad visual muchas veces necesitamos crear la marca desde cero, sin siquiera disponer del nombre de la marca.

Para trabajar el proceso de naming, Namelix es una opción muy interesante, ya que nos genera una gran cantidad de propuestas en poco tiempo, dándonos incluso información de la disponibilidad del dominio para cada nombre seleccionado.

En este caso el uso de la inteligencia artificial reduce notablemente el proceso de ideación, pero como en el caso de Looka, la decisión final no debe estar condicionada por un tema de gustos personales, sino de una compresión estratégica de la marca.

Ventajas de usar la IA en proyectos de diseño gráfico

Una de las formas en que la IA puede ayudar a los diseñadores gráficos es mediante el uso de algoritmos para realizar tareas repetitivas y tediosas. Por ejemplo, la IA puede ser utilizada para retocar imágenes, ajustar el color, crear patrones y texturas, generar imágenes a partir de texto y realizar otras tareas que normalmente llevarían mucho tiempo. Esto es indiscutible y permite a los diseñadores gráficos enfocarse en tareas más creativas y estratégicas, como las funciones de un facilitador, la conceptualización de ideas o la toma de decisiones.

La inteligencia artificial no supone un riesgo para el diseño gráfico en si misma, pero si para su reputación.

Aplicaciones como las de Adobe están empezando a utilizar estas herramientas de inteligencia artificial para añadirlas en sus paquetes, siempre como ayuda al proceso del creativo, pero nunca como su sustituto.

Aunque la IA puede ser capaz de crear diseños básicos, aún no puede igualar la creatividad y la habilidad de un diseñador humano en términos de conceptualización de ideas y toma de decisiones. Además, muchos trabajos de diseño gráfico requieren una comprensión profunda de la comunicación visual y el arte, y esto es algo que la IA aún no puede replicar.

El verdadero riesgo de la IA para el diseñador gráfico

Como hemos podido ver la inteligencia artificial no supone un riesgo para el diseño gráfico en si misma, pero si para su reputación. Me refiero a la devaluación que pueda sufrir todo proyecto gráfico por el hecho de que existan herramientas de inteligencia artificial. No son pocos los que aún piensan que herramientas de edición de imágenes como Photoshop cuentan con una herramienta mágica capaz de hacer todo el trabajo con un solo click. Con la inteligencia artificial ocurrirá algo parecido a una escala mayor, ya que afectará a casi cualquier trabajo digital.

En internet existen numerosos artículos y videos que prometen maravillas gracias a la inteligencia artificial, pero que requieren de un aprendizaje, además de conocimientos de comunicación visual y técnico y una investigación previa para poder tomar decisiones coherentes y no caer en simples gustos subjetivos, que no consiguen más que enaltecer el ego de quien lo crea.

Por eso, es nuestro deber como diseñadores gráficos dejar claro en que consiste nuestro trabajo, explicar el proceso y los pasos necesarios para garantizar un proyecto exitoso y evitar así caer en manos de clientes tóxicos, que seguro que se multiplicarán con la inteligencia artificial.

¿Es la IA una amenaza para el diseño gráfico?

A día de hoy NO, y dudo que algún día reemplace la labor del diseñador gráfico, como profesional capacitado para la toma de decisiones creativas y comunicativas. Debemos considerar a la IA una herramienta más en el proceso de todo el proceso de diseño gráfico que ayuda a resolver ciertas tareas en un tiempo muy reducido, y que nos permite dedicarlo más a procesos creativos y de investigación.